14 de abril de 2020
Foto: Divulgación / Grupo de Puebla

El Grupo de Puebla, la organización integrada por líderes progresistas de América Latina, aseguró que la emergencia provocada por el coronavirus demostró el fracaso de las políticas neoliberales, defendió el papel de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y cuestionó la manera en que gobiernos de derecha están enfrentando la pandemia, en especial el presidente Jair Bolsonaro en Brasil, a quien acusó de estar cometiendo directamente crímenes de lesa humanidad por contradecir evidencias científicas y poner en peligro a la población.

Los miembros de este bloque realizaron una cumbre virtual de emergencia para analizar el impacto de la pandemia y el contexto político, económico y social, con un reconocimiento especial a la reacción que ha tenido Alberto Fernández en Argentina y críticas al desempeño de Bolsonaro, de Sebastián Piñera en Chile y Lenín Moreno en Ecuador. También denostaron que, a pesar de la crisis sanitaria, Estados Unidos mantenga el bloqueo contra Cuba y Venezuela.

Las sesiones se realizaron durante tres días y en ellas participaron 29 líderes encabezados por Fernández, quien es el único presidente en ejercicio del Grupo; los exmandatarios de Brasil, Dilma Rousseff y Luiz Inácio Lula da Silva; de Paraguay, Fernando Lugo; y de Ecuador, Rafael Correa; y los excandidatos presidenciales de Chile, Marco Enríquez-Ominami; México, Cuauhtémoc Cárdenas; Brasil, Fernando Haddad; y Uruguay, Daniel Martínez, entre otros.

“Esta crisis no tiene otra salida que la integración latinoamericana y caribeña y la cooperación en nivel mundial. Y esa integración y cooperación deben estar soportadas sobre los hombros de la noción del conocimiento y de la solidaridad”, afirmó la declaración final del encuentro que constó de 14 puntos en los que, además, se defendió el rol de la OMS ante los intentos de otros líderes por debilitarla, en especial el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Agregó que los progresistas que gobernaron hace una década y de manera simultánea a la región supieron integrar a los países no sólo con tratados comerciales, sino desde la solidaridad y la cooperación, económica, política, cultural y del conocimiento, pero los gobiernos de derecha retrocedieron en ese proceso. “Por ello, el Grupo de Puebla protesta contra la total omisión de la OEA en la gestión de la crisis del Covid-19 y saluda los esfuerzos del Gobierno de México por recuperar el rol de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) como espacio de coordinación e integración continental”, dijo.

Al evaluar las gestiones individuales, celebró la determinación con la que el Gobierno de Argentina enfrenta la pandemia con un esfuerzo para articular una respuesta sanitaria y económica para proteger a los ciudadanos, en particular a los más vulnerables, así como el llamado de Fernández a crear un Fondo Mundial de Emergencia Humanitaria.

Propuestas frente al coronavirus
Entre las medidas concretas que pueden aplicarse, planteó, se encuentra la entrega de un salario mínimo mensual por un año a la población más vulnerable, lo que tendría un costo aproximado del 2,2 % del Producto Interno Bruto, cifra que consideró abordable por las economías latinoamericanas y caribeñas.

“Los países y los pueblos no pueden decidir entre salud o economía. Ese es un falso dilema que se supera gracias a la dimensión que las articula: la política. La solución a la crisis del Covid-19 es política, y esa política es la progresista, pues solamente relevando el rol del Estado en sus decisiones sobre los asuntos públicos lograremos que la primacía de lo solidario sobre lo individual, y que la integración de los países más allá de lo meramente comercial, aseguren que nuestros sistemas puedan estar preparados para emergencias como la que vivimos”, afirmó.

En ese sentido, el Grupo de Puebla invitó a los gobiernos, organismos y pueblos del mundo para que, cuando termine la pandemia, se reflexione de manera conjunta sobre un nuevo modelo de desarrollo, que coloque en primer lugar valores como el medio ambiente, la inclusión social, la reducción de la desigualdad, la seguridad alimentaria, el desarme militar, el multilateralismo, y la progresividad fiscal.

“El mundo globalizado después de esta pandemia debe ser el mundo de la colaboración y la acción colectiva nacional e internacional”, conminó.

Vea el discurso de Lula da Silva:

RT